miércoles, 13 de enero de 2010

Política Europea: Presidencia de turno española

En este semestre de presidencia española de la Unión Europea, los partidos políticos españoles están haciendo un ejercicio de cohesión. Todo el mundo desea que esta primera presidencia semestral tras la aprobación del tratado de Lisboa sea un referente para futuras presidencias y siente una base política e institucional dentro de Europa.

¿Cuál es la receta para una Presidencia de turno de la Unión?
  • Puede ser como la francesa, en la que Sarkozy fue protagonista en todos y cada uno de los eventos europeos.
  • Puede ser como la británica, impulsando causas pero manteniéndose al margen de cualquier decisión importante.
  • Puede ser como la alemana, europeizadora al máximo pero con un grado ciertamente alto de nacionalismo y protección de los propios intereses alemanes.
  • Puede ser incluso como la checa, antieuropeísta y boicoteadora de todo lo referente a la Unión.

Yo creo que siendo España como es, un país lo bastante europeísta como para alegrarse de que ostentemos la presidencia de turno, debe centrarse en acabar con el sentimiento de algunos países miembros de que la Unión Europea no sirve para nada.

Este semestre será complejo por muchas causas, entre otras que es la primera vez que existe un presidente permanente a la vez que el presidente de turno y el presidente de la Comisión Europea.
Estas tres cabezas visibles deben conseguir que cada vez se simplifique más la burocracia de las instituciones europeas. Bien dijo Zapatero que la persona más importante ahora es Van Rompuy y sin embargo se dejó en el tintero a las miles y miles de personas que trabajan a diario en todas las instituciones europeas. Los funcionarios son los que de verdad hacen que funcione el Parlamento, la Comisión y la Justicia europeas. Pero son demasiados.
Rebajar el numero de personas no debe ser algo que dejar de hacer por no crear más paro o por la pereza de perder ayuda. Es una reforma que se debe acomete, como la de eliminar altos cargos y altos representantes que ostentan el título pero trabajan bien poco.

La Unión Europea necesita de una democracia estable, limpia y fácil de renovar. El mastodóntico Parlamento y las inmensas comisiones no hacen sino estorbar para llegar a acuerdos necesarios en la Europa de los 27, como establecer una política económica y otra sobre inmigración comunes.

El Tratado de Lisboa es bueno para la Unión se dice. Sí, es bueno pero con algunos matices.
España tiene menor poder dentro del Parlamento, y recibirá menos fondos de desarrollo europeos ya que la nueva legislación para asignación de esos fondos establece que no se va a medir la necesidad de los países por densidad demográfica de cada una de sus regiones y su renta per cápita sino por desarrollo y pobreza de cada uno de los países en conjunto. Con la entrada de Rumanía, Bulgaria y algún que otro país ex soviético más, el nivel medio de riqueza per cápita disminuirá tanto que España se elevará en el ranking de países más ricos.

En definitiva y según decía el ex presidente Felipe González esta mañana, Europa tiene la posibilidad, los medios y las instituciones para que se avance en el objetivo de crear una política económica común y unas políticas sociales también comunes para todo, lo que hace falta es la voluntad de los líderes políticos para llegar a hacerlo.

2 comentarios:

  1. España lo hará bien, que son todos unos catastrofistas!


    Por cierto me encanta la relación mundo naranja xD

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  2. Pienso que vamos a salir muy mal parados, tras estos 6 meses, y no solo de imagen...un besiko amor!!!

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